Lava la carne y sécala muy bien con papel de cocina.
Salpimenta la pieza y átala con hilo de cocina o si lo prefieres usa una malla, para que quede una forma bonita.
Unta la carne con manteca de cerdo (esto es opcional, yo no lo hice).
Coge un caldero donde quepa la pieza de carne entera. Añade un dedo de aceite y cuando esté bien caliente, dora la carne muy bien por todos lados, a fuego fuerte.
Añade el oporto, el agua y sal al gusto. Cocina 6 o 7 minutos, por un lado, dale la vuelta y cuenta otros 6 o 7 minutos y ya estaría lista.
Retira la carne del caldero y reserva. Mantén la salsa al fuego para reducirla un poco, remueve de vez en cuando, y retira del fuego cuando haya reducido.
Cuando la carne esté templada, córtala en lonchas finas y sirve con la salsa en una salsera.