Lava las habichuelas, quítales las hebras y córtale los extremos. Pártelas en trozos más o menos regulares y cuécelas al vapor o guisadas con agua y sal* hasta que estén tiernas, pero al dente.
Pela los ajos y pícalos pequeñitos. En una sartén grande añade 3 o 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y dora los ajos ligeramente. Añade entonces el pimentón y rehoga 1 minuto sin dejar de remover a fuego medio. Añade las habichuelas y saltéalas 1 minuto con los ajos, el aceite y el pimentón, sala a tu gusto. Si quieres puedes poner un chorro de vinagre al final y dejar unos segundos hasta que se evapore.
Sirve las habichuelas con huevo duro troceado. También puedes añadirle unas papas fritas cortadas en cuadraditos.
Notas
* Mi manera preferida de preparar las verduras es al vapor, es como mejor conservan su textura y todos sus nutrientes. También las puedes cocer en la olla exprés rápida con muy poquita agua y estarán listas en pocos minutos.