Corta el lomo de atún en 3 o 4 trozos grandes, ponlos en un caldero y cúbrelos con agua. Añade sal, una hoja de laurel y un chorro de vinagre* tapa el caldero y ponlo a guisar hasta que el atún esté listo, entre 10 y 15 minutos dependiendo de lo grueso del atún. Cuidado con el tiempo para que el atún no se reseque, en cuanto veas que está blanquito estará listo. Escúrrelo y deja enfriar.
Mientras tanto pela la cebolla y córtala en brunoise no muy pequeña y ponla en una ensaladera. Pica el pimiento igual y añádelo junto con la cebolla.
Prepara la vinagreta, en un bol mezcla el aceite, el vinagre, la sal, y el orégano y añade una pimienta de cayena pequeña partida por la mitad, mézclalo bien y deja reposar un rato.
Desmenuza el atún con las manos en trocitos y ponlo en el bol junto con la cebolla y el pimiento picados.
Quita la pimienta de cayena de la vinagreta y tírala*. Vierte la vinagreta sobre el atún, remueve bien y espolvorea por encima perejil fresco picado. Mete en la nevera y sírvelo bien frío acompañado de pan para mojar :-) .