Es curioso que cuando somos niños no nos suelen gustar las verduras ni las legumbres, pero según nos vamos haciendo mayores cada vez nos gustan más los platos de cuchara, como este potaje de lentejas que es uno de mis platos preferidos.
Y cuando te vas de casa a estudiar fuera, por ejemplo, y vuelves, ¡Que bien te saben esos potajes de tu madre!. Y es que esas recetas de toda la vida, las que nos trasladan a nuestra infancia, a nuestro hogar, son las mejores, tienen ese poder reconfortante.
El potaje de lentejas yo siempre lo he hecho con verduras sin nada de carne ni chorizo, pero no por nada, sino porque me gusta así, y además es más sano.
En general no suelo poner carne a ningún potaje, pero porque me gusta el sabor de las verduras y de las legumbres sin más, aunque otra cosa es una buena fabada o unas garbanzas 😉
Aunque esta es mi receta, que es muy sencilla, está influenciada por la de mi suegra que siempre le pone piña de millo al potaje de lentejas, y la verdad es que le da un sabor riquísimo, así que la he adoptado 😀
Hacer un potaje de lentejas es fácil, solo debes tener en cuenta que las lentejas absorben mucha agua, incluso aunque las dejes en remojo, así que hay que calcular bien la cantidad de agua, porque si no se te puede quedar como cemento armado, que a mi me ha pasado, jaja.
Pero para que no te pase he calculado muy bien las medidas de la receta, así que si usas las cantidades que te doy no vas a tener ningún problema, te quedarán en su punto, ni muy líquidas ni muy espesas.
Si se te espesan demasiado sólo tienes que añadir más agua.
Otro problema típico de las lentejas es que se suelen pegar, precisamente por no controlar la cantidad de agua y también porque hay que removerlas de vez en cuando.
Para este potaje he usado lentejas de Lanzarote, un producto de excepcional calidad del que quiero hablarte un poco.
Sobre las lentejas de Lanzarote
En Lanzarote se cultiva desde hace más de 200 años una variedad de lenteja única. Las características del suelo volcánico y del clima de la isla le confieren sus particulares características.
No están muy claros los orígenes de este cultivo, pero se cree que pudieron llegar desde Turquía o Siria.
La lenteja de Lanzarote tiene un color verdoso muy característico y las hay de 3 tamaños, chiquitita ó menuda, mediana y lentejón.
La lenteja es un cultivo de secano, por eso se ha adaptado tan bien al suelo y al clima de la isla. Se suele plantar en las zonas altas de la isla, en los enarenados.
Lamentablemente la producción ha ido disminuyendo, ya que se trata de un producto que se recolecta manualmente, por lo que no puede competir en precio con otros cultivos más industrializados, de hecho es raro encontrarla en los supermercados.
Estas que he usado para hacer este potaje las compré en el mercado al peso.
Pero si que verás en los supermercados, algunas marcas que ponen “lentejas tipo Lanzarote”, son lentejas que han intentado imitar a la de Lanzarote, que se asemejan en el color y en tamaño, pero que en calidad y sabor no tienen nada que ver.
Hubo una época en que la lenteja de Lanzarote se exportaba a muchos lugares del mundo y era muy valorada, de ahí que en otros lugares se haya intentado reproducir esta legumbre y la denominen “lenteja tipo Lanzarote” es como un sello de calidad.
En Lanzarote se dan especialmente bien las legumbres, a pesar de la escasez de agua, el subsuelo protegido por el rofe (picón, ceniza volcánica) le aporta la humedad necesaria para dar unas legumbres excepcionales, también son excelentes las cebollas, las sandías, los chícharos, las batatas, las papas, arvejas, habas, garbanzos, etc.
Tenemos que apoyar a los productores locales, que hacen un esfuerzo enorme para que no se pierdan esos cultivos tradicionales que forman parte de nuestra cultura, de nuestro paisaje y también por ecologismo.
Es mucho más sostenible comprar productos producidos a unos pocos kilómetros de tu casa, que traídos de la otra parte del mundo.
Así que solo te digo una cosa, ¡Consume producto local! por favor.
Bueno, no me enrollo más, te animo a que pruebes mi receta, es muy sencilla, sabrosa y saludable.
¿A quién le apetece un buen plato de lentejas? 😀
Receta de potaje de lentejas con calabaza y millo
Potaje de lentejas
Ingredientes
- 3 ó 4 cdas de aceite de oliva virgen extra
- 2 dientes de ajo
- 1 cebolla
- 250 g de calabaza (peso sin piel ni pipas)
- 1 papa mediana (150-180 g)
- 1 piña de millo
- 150 g de lentejas (de Lanzarote o tipo Lanzarote)
- Sal al gusto
- 1 hoja de laurel
- 1 L de agua
Elaboración paso a paso
- La noche anterior dejamos las lentejas en remojo* con abundante agua.
- En una olla ponemos el aceite. Pelamos los ajos, los picamos pequeñitos y los sofreímos sólo hasta que empiecen a dorarse, añadimos la cebolla cortada en brunoise y rehogamos hasta que esté transparente, unos 10 min aprox.
- Mientras tanto pelamos la calabaza, le quitamos las pipas y la cortamos en cuadraditos medianos.
- Pelamos la papa y la cortamos también en cuadraditos pequeños (como si fueran para tortilla de papas).
- Pelamos la piña de millo, quitándole todas las greñas y la cortamos en 4 o 5 trozos, cuidado porque está dura, no te vayas a cortar.
- Escurrimos las lentejas del agua del remojo y las añadimos a la olla junto con la calabaza, la papa, el millo, una hojita de laurel, un poco de sal y el agua. Removemos y cerramos la olla.
- Si vamos a usar olla exprés, estarán en 15 min contados a partir de que empiece el vapor.
- Si usamos una olla normal, tapamos para que no se evapore mucha agua, y removemos de vez en cuando para que no peguen. vigila que tenga agua suficiente, tardarán 1 h más o
menos. Si vemos que se está espesando mucho añadiremos más agua.
Notas
- Aunque el remojo no es imprescindible en las lentejas, yo prefiero dejarlas en remojo, porque así se harán antes, son más digestivas y no absorberán tanta agua durante la cocción.
- Las lentejas se pueden preparar de mil maneras, también puedes ponerle zanahoria y calabaza, en vez de millo, o añadir pimiento verde o si te gustan con chorizo.
- Otra forma clásica de prepararlas en Canarias es con arroz, añade un puñado de arroz a la cocción, de esta forma tendrás un plato nutricionalmente completo.
Hola otra vez
Gracias Rosa por la receta y tu respuesta
Salvador
Hola Salvador,
Gracias por tus aportaciones, sí tienes razón en lo que apuntas.
Revisaré mis explicaciones 😉
Un saludo
Hola
Solo tres apuntes:
-La papa para tortilla no se corta en daditos sino en lajas del tamaño como de 2’5 a 3 cm de ancho y bastante delgadas
-Solo la lenteja pardina no necesita remojo, pero aun así le conviene por una hora o así
-Como el arroz tiene distinto tiempo de cochura que las lentejas conviene cocerlo aparte, y juntarlo con las lentejas ya en el plato
Salvador